¡Marchando una de palomitas!

Una de las delicias del verano es acudir al cine, ya sea al aire libre, o en una cómoda y fresquita sala con aire acondicionado; os invitamos a nuestra sesión continua de cursos para todos los gustos y colores

 

Si hay algo que se cumple año tras año en verano, además de los Cursos de la UNED, es el calor sofocante que estamos pasando en los últimos días. Y si hay algo que puede ayudarnos a mitigar ese calor, aparte de un buen vaso de agua con hielo, o una cervecita bien fría, es una sesión de cine al abrigo del aire acondicionado de la sala. Por eso os traemos una propuesta de sesión continua, con una serie de películas de todo género, época y color. Tal y como son nuestros Cursos de Verano, que tal y como rezaba el lema de la Metro, en ellos hay “más estrellas que en el cielo”. Pasen y acomódense, que empieza el espectáculo…

Un ‘cosmos’ de conocimientos

Viajamos al pasado para traeros el presente, el de los Cursos de Verano de la UNED que se han celebrado en los últimos días

 

Pitágoras (ca. 569 a.C. – ca. 475 a.C.) fue el primer sabio en utilizar la palabra “cosmos” para indicar un universo bien ordenado y armonioso, un mundo capaz de ser entendido por el hombre. Eso es lo que son, en esencia, los Cursos de Verano de la UNED: un universo de conocimientos bien ordenado y armonioso, cuyos elementos (los cursos) configuran un cosmos de sapiencia. Los pitagóricos estaban fascinados por los sólidos regulares (también llamados platónicos), objetos tridimensionales simétricos con el mismo polígono regular en todas sus caras. Podemos encontrar un número infinito de polígonos regulares, pero solo existen cinco sólidos regulares. Por algún motivo, el conocimiento del dodecaedro (con doce pentágonos regulares como caras) les parecía peligroso a los pitagóricos; el sólido estaba relacionado místicamente con el Cosmos. Los cuatro sólidos regulares restantes se identificaban con los “elementos” que en aquel entonces se suponía que constituían el mundo: aire, fuego, tierra y agua. Así que pensaron que el quinto sólido regular solo podía corresponder a la sustancia de los cuerpos celestiales, la quintaesencia. En los veranos de la UNED, esta quintaesencia la conforman nuestros estudiantes, que cada día llenan las aulas y algunos hasta nos cuentan sus experiencias… Hagamos un repaso a estos días de la mano de estos elementos…

La seguridad por encima de todo

Los deportes de montaña ganan adeptos cada año, un crecimiento que lo lideran las actividades de Escalada Deportiva y el Descenso de Barrancos. Ante el desconocimiento en muchas ocasiones de su técnica, y lo que es más importante, sus normas de seguridad, la UNED ha impartido en El Barco de Ávila el Curso de Verano “Seguridad en los deportes de montaña: Escalada y Barranquismo”

 

Seguridad. Esta ha sido la palabra más repetida durante este Curso de Verano desarrollado en El Barco de Ávila. Hay que tener en cuenta que este término es el denominador común del éxito en las actividades de montaña, tanto en los materiales como en las técnicas y las maniobras.

 

De ahí la importancia de que la UNED desarrollase una vez más “Seguridad en los deportes de montaña: Escalada y Barranquismo”, unas jornadas dirigidas por Manuel García Rodríguez, profesor ayudante de la Facultad de Ciencias de la UNED, y coordinadas por Carlos Ramos Rodríguez, coordinador de Deportes de la UNED.